Es perfecto para quienes aman explorar nuevos lugares, las grutas están en el Cerro del Águila. Es una cueva en cuyo interior pueden apreciarse pequeños lagos de agua, un río subterráneo y un salón con estalactitas y estalagmitas.
Para llegar hay que transitar poco más de 5 kilómetros por un camino de terracería. Es un sinuoso trayecto que vale mucho la pena, y en poco tiempo llegarás a la entrada hasta un un agujero que más bien parece una madriguera por donde hay que bajar.
El predio cercano es útil para la recreación y el esparcimiento de toda la familia, cuenta con un cuerpo de agua corriente y con accesibilidad por camino vecinal, por lo tanto, se pretende establecer un espacio apropiado para la visita de diferentes segmentos turísticos interesados en la recreación, el turismo de naturaleza, la realización de eventos y la enseñanza ecosistémica.