El Templo Mayor, ubicado en el corazón de la Ciudad de México, es un sitio emblemático y patrimonio de la humanidad que cuenta la historia de la antigua civilización mexica. Este impresionante complejo arqueológico, que data del siglo XIV, fue el centro religioso y ceremonial de Tenochtitlán, la capital del Imperio Azteca. Su descubrimiento en 1978 reveló la grandeza de una cultura rica en tradiciones y creencias.
Entre los imperdibles de este lugar, destacan:
- Las impresionantes ruinas del templo, donde se pueden observar distintas capas de construcción.
- El Museo del Templo Mayor, que alberga una colección invaluable de artefactos prehispánicos.
- La gastronomía local, donde no puedes dejar de probar los tacos de canasta y las quesadillas.
- Artesanías en los alrededores, como la cerámica y los textiles tradicionales.
- Experiencias únicas como tours guiados que te sumergen en la historia del lugar.
La mejor época para visitar el Templo Mayor es durante la primavera (marzo a mayo), cuando el clima es templado y los días son soleados. Además, en el mes de agosto se celebran festividades en honor a los mexicas, lo que añade un toque especial a la visita.
En cuanto a datos prácticos, el acceso al Templo Mayor tiene un costo aproximado de $85 MXN y el museo puede ser visitado de martes a domingo, de 9:00 a 17:00. Se recomienda la compra de boletos con antelación y, aunque se puede recorrer sin guía, un tour enriquecedor es altamente recomendable. Evita las horas pico de la tarde para disfrutar de una experiencia más tranquila y memorable.